domingo, 5 de febrero de 2012

Los quijotes

Los quijotes son unas defensas que protegen los muslos del guerrero. La raíz etimológica es koksa- en la que se incluye el latín coxa (muslo, cadera). Palabras como cuixat, cuxa, cuja, cuisses, cuixa, cuixot y un largo etcétera, hacen referencia a los muslos, la cadera o al quijote.





La primera mención militar de los quijotes o los muslos de un guerrero la da un monje de St Gall que describe en el s.IX el aspecto del cadáver de Carlomagno y sus muslos cubiertos de malla:



Coxarum exteriora: in eo ferreis ambiebantur bracteolis.



Hasta el s.XIII los muslos solían protegerse con calzas o brafoneras de todo tipo y en ocasiones bajo la falda de la loriga o lorigón. Abajo calzas medievales.





Con el tiempo la loriga demostró que tenía que ser reforzada para presentar cara a las nuevas armas y modos de combatir. Las corazas y fojas (ambas equipadas con correas) demostraron ser eficaces y maniobreras de llevar con la loriga, otro tanto ocurrió con los quijotes sobre las brafoneras. Hacia 1220 aparecen en Europa los gamboisses cuisses (quijotes gambesados). Se trataba de musleras fabricadas con el mismo material que el gambesón (paño grueso de estopa y lino) que se ataban con correas a la parte posterior del muslo. Se colocaban sobre las brafoneras o calzas civiles. Abajo vemos unos vistos desde atrás.






Desde la segunda mitad del s.XIII algunos guerreros optaron por proteger sus muslos y/o pantorrillas con defensas fabricadas de cuero rígido atadas con correas sobre las brafoneras. Dichas defensas iban acompañadas a menudo de primitivas rodilleras del mismo material.




Hasta 1340 los quijotes gambesados fueron comunes, pero desde entonces hasta mitad de siglo se construyeron a la moda del par de placas o coracina (con láminas metálicas remachadas), usualmente con rodilleras globulares. 






Cuando aparecieron los quijotes de platas a mediados de siglo, ya no se empleaban brafoneras, con lo que se ponían encima de unas calzas especiales llamadas martingalas. Hacia 1370 los quijotes de placas que consistían en una simple placa fueron comunes, y tenían embozados los filos bajos para rellenar las rodillas del guerrero, éstos fueron articulados a las rodilleras por rivetes. 




Por último hay una mención en un documento español del año 1493: "Medios quijotes, grebas...". Seguramente eran quijotes que defendían el muslo solamente por delante.

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