domingo, 16 de septiembre de 2012

Aniversario

Queridos amigos:

Hoy se cumple un año desde que el presente blog comenzó a funcionar. Durante todo este tiempo ha sido un verdadero placer trabajar para que la comunidad hispanoparlante aficionada a estos temas tenga una visión verdadera sobre la evolución general del armamento antiguo, que nada tiene que ver con la imagen estática a que nos tienen acostumbrados. Espero que hayais disfrutado las entradas tanto como yo lo he hecho realizándolas. Hasta la fecha las más visitadas han sido "Báculos", "Ballestas primitivas" y "Azotes en el mar".


Mucho me temo que el futuro de "Armas y armaduras en España" estará limitado a la mejora de las entradas ya existentes, lo cual no es poco. Prácticamente he tratado sobre todas las armas que mi monumental base de datos histórica me permite. Seguir publicando entradas teniendo como base libros modernos es contrario al espíritu de este blog. Dedicarme a hablar de armas de otros países sería fácil para mi, pero esto se sale de España, con lo que no sería muy coherente. 


He hecho numerosas actualizaciones y correcciones de entradas antiguas, entre ellas están "Orígenes del hacha", "Lorigas", "Carcajes, aljabas y goldres", "Dardos", etc. Agradecería mucho que me facilitaseis links sobre textos medievales hispanos dedicados a armas, de este modo las entradas no se quedarán obsoletas. Vuestra implicación es esencial. Estais todos invitados a mi castillo para celebrar el aniversario de marras.


Las siguientes personas han colaborado en alguna/s de las entradas: Amo del castillo, Gilgamesh, Luis Barcelona, Germán Tranquilo, Miguel Angel, y algún que otro que no recuerdo en este momento. Todos ellos podrán disfrutar, aparte del almuerzo, de las bodegas del castillo por sus aportaciones desinteresadas.



¡Feliz fiesta!

El Tormenta

sábado, 15 de septiembre de 2012

Brazales y mangas

Brazales: "Brazo" viene del latín brachium, su raíz etimológica es mreghu- "corto". Se le llamó así por ser más corto que la pierna. En la Francia del s.XII las cueras iban a veces equipadas con brazales (brachieres). Los brazales ocupaban desde el hombro hasta la muñeca, se dividían en dos partes: avambrazo y guardabrazo.

La palabra "avambrazo" aparece tanto en Inglaterra (vambrace) como en España hacia el s.XIV y designaba originalmente la protección que cubría el antebrazo. Para muchos autores modernos el avambrazo cubre desde el hombro hasta la muñeca, pero esto se da de bofetadas con la realidad histórica. Por otro lado la parte del brazo que cubría desde el codo al hombro se llamaba guardabrazo (en Inglaterra rerebrace). El término, como veremos, no distingue entre protección flexible o rígida, tan solo se refiere a aquello que defiende el brazo. Los romanos empleaban guardabrazos de tiras de cuero (pteriges) o láminas articuladas.





Los guardabrazos de tiras continuaron usándose en el medievo por parte de los bizantinos.


En otras ocasiones se trataba de la malla que formaba parte del lorigón, como vemos en este caballero romano del s.IV d.C.  


La palabra "guardabrazo" está documentada en España desde 1250, como parte del equipo transportado por una galera:

5 Hombres guarnidos de hierro
4 Ballestas de estribera, otras cuatro de 2 pies.
1000 cuadrillos
50 lanzas
10 guardabrazos
10 escudos
10 Capillos de fierro.



Poco después, en las Partidas se hace referencia al guardabrazos equiparándolo con las mangas:

E el que llevase guardabrazos con perpunte e capillo de hierro, una caballería. E lorigón es dicho a aquél que llega la manga hasta el codo e no pasa más adelante hasta la mano; e camisote es el que llega la manga hasta la mano; e guardabrazo es el que tiene mangas.


Con la llegada del arnés de platas, los brazales eran protecciones complejas que se combinaban con malla, platas, cañones y codales, incluso a veces las hombreras iban unidas al guardabrazos.


En 1476:

Por otra parte, el hombre de armas debía llevar caballo, cubiertas, arnés cumplido y lanza; el jinete, caballo, coraza, falda, gocetes, quijotes, brazales, capacete, babera y lanza;

En 1495 se dice:

Los doscientos habían de ser hombres de armas con sus pajes y caballos encubertados, y todos armas blancas según pertenescia a hombres de armas y lanzas largas -caballería pesada-, y los trescientos a la gineta según acostumbraban armarse: a saber es con corazas, capacetes, babera, armaduras de brazo, faldas y quijotes.


A comienzos s.XVI:

Piqueros con coselete completo, celada borgoñota, gola, peto, espaldar, faldón, guardabrazos, hombreras, cañones, guardas y manoplas, además de la pica llevaban una espada recta de cazoleta y gavilanes.

Infante vestido con coselete completo, grebas, quijotes, cañones, brazales, guardas, celada completa de hierro batido, espada de 2 manos, lanza de ristre con manija y banderola.

Los infantes llevaban ródela, espada, dardo, celada, coselete con gorjal y brazales.

El equipo de los jinetes o caballos ligeros era: un caballo, coraza, capacete, barbera, quijote, faldas de mallas, guarnición entera de brazos, lanza, espada y puñal o daga.

Hacia 1570:

Cada caballero debe equiparse con una celada borgoñona, una gola, una coraza con su ristre, y escarcelas largas, brazales y guardabrazos, y guanteletes, y lanza de armas con su hierro de punta de diamante.


En dos documentos de 1590:  

Arnés, peto, espaldar, brazales, manoplas, lanza, espada ancha y daga.Un arnés blanco con sus platas, brazales, gola, celada, guardabrazos y mandiletes con faldones de tela de oro, sobre azul, espada y lanza.

Mangas: "Manga" viene del latín manica, propiamente "lo que cubre la mano". Esto me lleva a pensar que las primitivas mangas partían desde la mano, y no desde el hombro. Caso similar ocurrió con las calzas, palabra derivada de "calzado", pues originalmente cubrían solamente los pies. Así, con el el paso de los siglos la palabra"calzón" llegó a designar a las calzas que cubrían desde la cintura a las rodillas. Actualmente las mangas cortas se refieren a las que cubren desde el hombro hasta los codos. Es importante aclararlo. Debido a la articulada naturaleza de la mano, este tipo de protección ha designado siempre un tipo de defensa flexible (mallas o ropajes).

Entre los gladiadores romanos era frecuente el uso de una manica acolchada para el brazo derecho, que era el que solía estar desprotegido por el escudo.


El uso de mangas para la guerra la heredaron los bizantinos durante el medievo, los clibanarios (caballería pesada) solían cubrir su cuerpo con un clíbano al que iban sujetas unas manikia que cubrían desde el hombro a los codos. También emplearon cheiromanikas (quiromangas) para cubrir los brazos hasta la mano.


Los carolingios heredaron plenamente la cultura armamentística romana occidental, como no podía ser de otra manera usaron mangas para cubrir los brazos cuando llevaban sus brunias:

Bruniam I, helmum I et manicam unam ad ipsum opus.



En documentos nórdicos del siglo XIII se habla de “manipulos ferreos”. En el poema de Lanzarote (s.XV), se traduce del francés “manicle” el español "manipulos" o "mangas tiradas", y hacen referencia a la protección del antebrazo y mano para la loriga. Es probable que mangas tiradas haga referencia a mangas que al soltarse quedan colgadas o tiradas.