viernes, 5 de abril de 2013

Cascos

Ningún arma defensiva ha acaparado tantas páginas como el casco, es de justicia que merezca un estudio que lo coloque en el lugar que le corresponde. Como imagina el lector, el término se usa indiscriminadamente para designar cualquier armadura de la cabeza, eso sin contar otros usos más modernos. Casi siempre el significado de las palabras varía cuando tornan los usos, el casco no es ninguna excepción.






"Casco" tiene como raíz kwet- (sacudir, agitar). El latín Cassis pasó al latín vulgar con la forma cassicum y de aquí casco "pedazo de vasija o teja roto" "armadura de la cabeza", por otro lado "cascar" procede del latín vulgar quassicare. Casco es también el hueso cóncavo que cubre la cabeza y contiene dentro de sí los sesos y el cerebro, se dijo así por la semejanza que tiene con cualquier casco de vasija redonda de barro.




No es casualidad que los romanos llamaran al casco del guerrero cassis  y posteriormente los  bizantinos chassis.







El chacó (procedente del húngaro csákó) era el casco propio de la caballería ligera del s.XIX, y aplicado después a tropas de otras armas. Abajo vemos diferentes modelos.






En cuanto a "Craneo" tiene como raíz ker-1 (cuerno, cabeza). Del griego procede el latín cranium "cráneo, casco". Como se sabe el cráneo es la caja ósea en que está contenido el encéfalo. Tampoco es coincidencia que los antiguos griegos llamaran kranos al casco militar. No debe olvidarse el vocablo "tiesto" proveniente del latín testu "tapadera de barro" y "vasija de barro"; derivado es tiesta (antiguamente testa o cabeza) que se tomó del italiano testa "pedazo de cacharro", de donde figuradamente "cabeza" y dialectalmente "frente". Los andalusíes del s.X usaban un casco de hierro llamado tishtaniya, palabra conocida por los godos hispanos y que procede del latín testinia. Abajo un par de kranos griegos.






Con estos pocos ejemplos puede comprobarse que el casco fue arma defensiva común a diferentes pueblos en todas las épocas. El casco del soldado es en sí mismo la armadura ajustada al cráneo. Pero no cualquier armadura, debe tener base con forma de vasija rota, y no puede ser de otro modo ya que en sí mismo el cráneo tiene forma de pedazo de vasija o medio melón.




Dicho esto vamos a describir otros de los cascos más conocidos:



Bacinete: Casco militar que procede de "bacín" (palabra ya conocida en el s.XIII), del latín tardío bacchinon, de origen desconocido pero seguramente relacionado con bacía. Bacía o bacieta es voz emparentada con bacín y con varias palabras del latín tardío (baccea, bacausa, bacchinon, bacar, de significado análogo); el origen último (quizá galo) y los pormenores relativos a la forma de bacía son inciertos, pero es verosímil que en España proceda de allende el Pirineo, quizá del francés anticuado bassie, que parece ser forma dialectal correspondiente al latín vulgar bacceata, derivado del citado baccea. Abajo bacinete del s.XIV.





El bacín o bacina era el vaso de barro vidriado (a menudo alto y redondo) que sirve para recibir los excrementos cuando se descarga el cuerpo. También la usaban los bárberos y algunos mendigos para pedir limosnas. El bacín no tiene una forma estándar, depende mucho del uso que se le de y la época o país al que pertenezca. Esa es la razón por la que existen bacinetes de morfología dispar. Abajo algunos bacines para diferentes usos; formas parecidas las he visto en cascos medievales, seguramente los llamaban "bacinetes".







En el museo de Estruch se hallan dos bacinetes (así denominados allí) harto interesantes. El primero, del s.XVI, está repujado y cincelado.





El segundo es del s.XVII y está rícamente grabado.





El casco conocido como "almete" es acortamiento de "bacinete de almena", más reforzado que los corrientes y de muy general uso en Alemania. Nada tiene que ver almete con "yelmo" ni etimológica ni morfológicamente. Abajo almete.







Hay una sola cosa que tienen en común todos los bacinetes (y bacines): su boca o base está ligeramente torcida hacia el exterior, posiblemente con objeto de repeler hacia afuera los golpes recibidos en la cabeza. A menudo se confunden capellinas con bacinetes. La capellina tenía normalmente una base o boca corriente y una parte picuda en la zona trasera de la coronilla, como un capucho. Abajo capellina celada.







Borgoñota: Casco ligero común entre la caballería ligera con visera movible, aunque ordinariamente no la tenía y dejaba el rostro al descubierto, imitando la forma de algunos cascos de la antiguedad clásica. Se cree procedente de Borgoña, se puso en boga a comienzos del s.XVI y se componía de crestón, sobrevista, guardanuca y carrilleras. Se conservan muchas de gran riqueza, de la época del Renacimiento, obras del mejor gusto y con asuntos históricos y alegóricos.




En Italia las borgoñotas se conocían también bajo el nombre de "casquete" (casquetel).  Las que tenían visera se abrían por debajo, llamáronse en España celada borgoñota






Casquete: La palabra se usaba como diminutivo de casco y algunas veces como craneo. Sin embargo frecuentemente se empleaba para designar a la cubierta circular y honda que se hace de lienzo, cuero o seda para cubrir el casco de la cabeza, si bien los había que se fabricaban de acero o hierro. Podía llevarse como protección adicional y comodidad bajo otros cascos o como única defensa de la cabeza, en éste último caso solían ser de acero o hierro (como la borgoñota).







En Inglaterra llamaban al casquete skull, siendo además esta palabra sinónimo de "craneo". 







Cervellera y celada: Raíz ker-1 (cuerno, cabeza). Del latín cervix "cerviz, cuello". La misteriosa cervellera medieval tiene la misma raíz etimológica que "casco", lo cual me lleva a pensar que se trataba de un casco con protección para la nuca. Afortunadamente existen multitud de ejemplos de cascos de este tipo en dibujos de la época y museos de armas. Todo ello avala esta hipótesis. 
  
 




Las primeras cervelleras o cerbelleras aparecen a mediados del s.XIII. Desde el siglo XV muchas de ellas fueron equipadas con visera móvil o fija para ofrecer mayor protección, aunque también las hubo sin visera (llamada "celada descubierta"), se conocieron popularmente con el nombre de  "celadas".  La celada fue propia de arqueros (especialmente la descubierta) y ballesteros de los siglos XIV y XV, no obstante algunos magnates la emplearon en la guerra.






Este casco siguió en uso en adelante, así en el inventario de la Armería de Segovia, 1504: Una cervillera guarnecida toda de argentería, con una vista y un barbote dallo mismo. Durante la expulsión de los moriscos valencianos por parte de Felipe III en 1609 se confiscaron muchas armas, entre ellas había más de 1500 cervelleras.







El término"celada" se usó como adjetivo con otro tipo de cascos a los que igualmente se les colocó una visera que cubría el rostro, la prueba es la amplísima variedad morfológica existente: Existían borgoñota celada o celada borgoñota, morrión sin celada, celada morrión, celada con barbote, celada con babera, celada completa, celada con su barbote, celada de engole, etc.







Otros cascos: Algunas armaduras de la cabeza pueden entrar en la familia de los cascos, así el morrión fue el casco-sombrero típico de los artilleros españoles que conquistaron las Américas. 




Kabuto es el nombre que se da en Japón para el casco, su forma lo delata como tal.





Entre los siglos VIII-V a.C. los primitivos kranos griegos fueron añadiendo protección a la cabeza, fabricándose de bronce o hierro. Llevaban un forro acolchado para atenuar los golpes. Desde el s. V a.C., se redujo el tamaño de las carrilleras para ganar en ligereza y audición. Fueron las carrilleras (fijas o móviles) el factor común de algunos cascos. 






A comienzos del s.XV aparece en Italia un casco a imitación de los antiguos kranos que se llamó barbuta (palabra que en italiano significa "babera"). La barbuta sobrevivió hasta 1480. Abajo vemos una.






2 comentarios:

Amo del castillo dijo...

¿Y cuál sería el origen del término baúl aplicado a los yelmos de cabeza de rana para los torneos?

Como siempre, un placer leerle, Sr. Tormenta

Saludos

El Tormenta dijo...

La palabra procede del francés antiguo bahur (hoy bahut), nombrada en el s.XII. Es de origen incierto, quizá onomatopéyico: compárese el verbo francés dialectal bahuter, bahurer, bahuler "meter ruido", por el mucho que se hace al clavetearlo y al cerrar la tapa del baúl.

La raíz etimológica es desconocida, así que hay que conjeturar. Viendo lo importante que son las formas para cascos y capillos no me extrañaría que se llamara así por la forma rectangular del baúl civil y militar. Yo apostaría por ello Sr. Amo.

Todo un gusto verle por aquí de nuevo.